Celtics vs Knicks: ¡Los campeones, sin red y sin Tatum!

Los Boston Celtics, los vigentes campeones de la NBA, están a solo un partido de caer eliminados mucho antes de lo que esperaban, en las semifinales de conferencia. Los de Mazzulla han de ganar tres partidos seguidos si quieren estar en la siguiente fase ante unos New York Knicks que sueñan con unas Finales de la NBA por primera vez en este siglo. Los Indiana Pacers ya esperan al ganador para buscar el trono del Este.

Muchos problemas para Boston

Los Boston Celtics se ven por primera vez en dos años contra las cuerdas. Los campeones, el equipo que ha maravillado a toda la NBA en las últimas dos temporadas, puede caer en apenas cinco partidos ante unos New York Knicks a los que habían arrasado en temporada regular. Pero esto son los ‘play off’, estos son picos de forma diferentes a los de entonces y este es un equipo que además va a sufrir no solo en esta eliminatoria, sino durante todo el año que viene, la baja de su jugador más importante.

Habrá tiempo de hablar de la lesión de Tatum pero, con el alero o sin él, los Celtics se han mostrado inferiores a los Knicks en estas semifinales de conferencia. Una derrota más elimina de forma matemática a los vigentes campeones. Es por ello que ya juegan sin red alguna, con el peligro de que todo va a ser un ‘Win or go home’ para los de Massachusetts.

Más allá de Tatum, no están terminando de encajar varias piezas en el entramado de estos Celtics. La primera de ellas es un Kristaps Porzingis aquejado de un virus que le impide estar al 100% en todos los ‘play offs’. Sin el letón en su mejor momento físico, los Knicks, especialmente con Karl-Anthony Towns, lo están aprovechando para percutir en la zona.

Tampoco está inspirada la defensa de perímetro de estos Celtics. Y ahí el nombre que está por debajo del rendimiento dado el año pasado, y que puede salir en verano, es Jrue Holiday. El base, ganador de dos anillos (Milwaukee y Boston), no está en su nivel óptimo y eso lo está notando Mazzulla tanto en ataque como en defensa.

Además, hay que hablar tanto de las ventajas que le han remontado -en el segundo y en el tercero llegaron a ir 20 puntos arriba- como la falta de acierto desde el triple, el gran y prácticamente única arma. Si quieren sobrevivir en la eliminatoria, han de estar cerca de la veintena.

El factor Tatum

Si los Boston Celtics se ven prácticamente eliminados este año, y con un futuro muy incierto, es debido a la lesión de Jayson Tatum. El alero se rompió el Aquiles a falta de tres minutos para el final del cuarto partido, una lesión que le mantendrá de baja no solo durante lo que reste de ‘play off’ para Boston, sino también toda la próxima temporada.

Este tipo de lesiones obliga a una recuperación muy larga y a la incertidumbre de si ya hemos visto al mejor Tatum de su carrera. No son pocas las ocasiones en las que un jugador ha vuelto por debajo del nivel anterior después de una lesión de este tipo. Lo que queda claro es que, salvo milagro, los Celtics tendrán que hacer una reconstrucción este verano y optar por un año de transición.

Los Knicks, al ritmo de Brunson

Los New York Knicks tienen al probablemente mejor jugador de estos ‘play offs’. No, no hablamos ni de Nikola Jokic ni de Shai Gilgeous-Alexander, que serán los primeros en la carrera por el MVP de la temporada, sino de un Jalen Brunson que está a un único partido de llevar a los Knicks a su primera final de conferencia en 25 años. Y es que desde el año 2000, cuando llegaron a sus últimas finales de conferencia, precisamente ante unos Pacers que ya esperan rival, nunca habían llegado tan lejos.

Hablar de Brunson es hacerlo del mejor ‘clutch player’ de toda la competición, como así dice el premio que ha ganado este curso. Es decir, es el jugador más determinante cuando más quema el balón, en los últimos minutos y con una diferencia de cinco puntos. Bien los saben los Detroit Pistons, eliminados por las canastas del base en los finales, y bien lo saben unos Boston Celtics que lo están sufriendo en sus carnes.

Pero estos Knicks no son solo Brunson, sino otros cuatro jugadores más. Thibaudeau, conocido por no rotar a sus jugadores, tiene en sus manos al mejor quinteto de toda la NBA. La segunda espada corresponde a un Karl-Anthony Towns que ha dado un paso más en sus prestaciones en esta ronda con respecto a la anterior, tanto a la hora de buscar el poste bajo cuando tiene jugadores más chicos como cuando es defendido por los grandes de los Celtics.

En las alas, además, se encuentran un Mikal Bridges del que ya nadie pregunta si las rondas del drafts dadas en su momento eran muchas o si era un jugador especial para los Knicks; y un Anunoby que es una tortura defensiva para todo aquel que se le ponga delante, sin olvidar, claro está, al todoterreno, al hombre para todo, a Josh Hart.

Desde el banquillo, quien más daño está haciendo es un Mitchell Robinson que, sin querer, ha recuperado el ‘hack-a’, es decir, el que le hagan faltas para que vaya a la línea de tiros libres. Sí, ha dejado imágenes dantescas, tiros que se quedan muy lejos del aro, pero está haciendo mucho daño en el rebote a unos Celtics que adolecen de una figura interior dominante.