Luka Doncic, un genio en busca de su primer anillo

No hay persona aficionada al mundo del baloncesto que no sepa quién es Luka Doncic. Hace décadas podría haber seguidores que no viesen los partidos de las estrellas de la NBA, pero las redes sociales han masificado el alcance hasta todos los lugares del planeta. Y el esloveno, uno de los mejores de la competición estadounidense, es también uno de los más seguidos de todo el baloncesto, tanto en FIBA -por su paso por el Real Madrid- como en la NBA. A las puertas de la final, desgranamos quién es Luka Doncic y qué ha hecho en estos ‘play off’.

Un genio desde pequeño

Para hablar del rendimiento de Doncic en estos ‘play off’, en los que se ha consagrado como una auténtica estrella de la competición, hay que ver primero quién es Doncic, cómo se ha criado y en qué tipo de baloncesto ha dado sus primeros pasos. El Real Madrid llamó al esloveno a jugar la Minicopa -un torneo de equipos de España con niños de 13 años- en el año 2013. Sin pertenecer a la plantilla, el hoy jugador de los Mavericks promedió 24.5 puntos, 13 rebotes y 38.5 de valoración para ser el MVP.

El Real Madrid sabía que tenía una joya en sus manos y que solo era cuestión de tiempo pulirlo hasta convertirlo en lo que es hoy en día, una estrella del baloncesto mundial. No tardaría mucho en debutar con la primera plantilla, y es que el 30 de abril de 2015, con 16 años, 2 meses y 2 días, jugó sus primeros minutos con el Real Madrid ante el Unicaja.

Su historia desde ahí no tiene parangón. Doncic, antes de ser elegido en el número 3 de su draft de la NBA, ganó todo siendo un adolescente. Pero no un adolescente cualquiera, sino el mejor adolescente que había dominado Europa. En el conjunto blanco ha sido capaz de ganar 3 Liga ACB, 2 Copa del Rey, una Copa Intercontinental y el trofeo más importante, la Euroliga. Además, en su último año antes del desembarco fue elegido mejor jugador de la ACB y de la Euroliga, así como de ambas finales, y el verano previo llevó a Eslovenia al oro europeo.

Con Luka Doncic a la cabeza

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— Gigantes del Basket (@GIGANTESbasket) June 5, 2024

Una estrella en la NBA

Doncic, desde bien temprano, ha mostrado sus facultades en la mejor liga de baloncesto del mundo. El esloveno, como base o como escolta pero siempre generador del juego, ha convertido a los Mavericks en candidatos a todo hasta llegar, este mismo año, a jugar las finales de la NBA, las terceras en la historia de la franquicia de Texas.

El heredero de Dirk Nowitzki, otra estrella europea que brilla bajo los focos de la NBA, se ha demostrado que es uno de los jugadores más determinantes. Los Mavericks sufren cuando el base o no está o está a un nivel inferior del mostrado habitualmente. Por fortuna para la franquicia texana, Doncic está al mejor nivel de su carrera.

Esta temporada ha quedado en el tercer lugar de la carrera por ser el mejor jugador de la temporada, solo por detrás de Nikola Jokic y Shai Gilgeous-Alexander. Pero si algo ha demostrado el balcánico es que ha sabido llevar a su equipo, a priori inferior que los Nuggets y los Thunder, a las finales de la NBA.

Llevar a los Mavericks a las Finales

Luka Doncic ha conseguido prolongar su espectacular estado de forma hasta los ‘play off’. Desde el parón del ‘All Star’, los Mavs han sido uno de los mejores equipos de toda la competición. Ha pasado de luchar por el octavo, noveno puesto a quedar en el quinto al final de la temporada regular. Y a partir de ahí, el balcánico ha sacado los colmillos para pasar una ronda tras otra, y tras otra, hasta enfrentarse a los Celtics en la eliminatoria por el título.

En la primera eliminatoria, en la primera ronda, los Mavericks superaron a unos Clippers que hasta entonces habían sido su bestia negra. Doncic, pese a tener problemas en una de sus rodillas, no quiso perderse ninguno de los seis duelos disputados. Y es que el base de los Mavs se fue hasta los casi 30 puntos por noche, los 8.8 rebotes y las 9.5 asistencias en cada uno de los encuentros. Unos números que, además, sirvieron a su equipo para pasar a las semifinales de conferencia.

Le tocaba enfrentarse a Doncic al que le había superado en el segundo escalón del MVP, un Shai Gilgeous Alexander que también mostró un gran nivel. Pero ante los retos, el europeo se crece y se fue hasta los 24.6 puntos. Si bien bajó con respecto a la primera fase, lo cierto es que aumentó sus números cuando más importaban los encuentros, en los últimos para cerrar el cruce.

Un nuevo rival importante tuvo en las finales de Conferencia Oeste. En esta ocasión, los Timberwolves de Anthony Edwards. Ahí, Doncic, acompañado de Irving, impuso su experiencia al servicio de Kidd para afrontar las terceras finales de su historia. Ante los Wolves, Doncic se fue hasta los 32.4 puntos, 9.6 rebotes y 8.2 asistencias, los mejores números de su carrera a estas alturas de temporada. Y el único partido en el que se quedó por debajo de los 30 puntos, fue el único en el que perdió.